domingo, julio 31, 2005

Lector

Sé que estás ahí, en este momento.
Recorres mis callejones sin sentido,
No sólo con tus ojos.

Díme quién eres,
qué oscuros motivos te han traído hasta aquí.
Por favor, no te vayas sin haber dejado por lo menos tus huellas
sobre los cristales de mi alma,
sin haberme dicho los vacíos que encontraste
en este valle silencioso.

Te hablo a ti lector,
te conjuro,
te ato a mí,
como mi alma lo está a mi mente.

No soy un escritor,
pero por lo menos,
tengo habitantes secretos
que también quieren aprender a ladrar
en el silencio azul de la luna.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tomoa...Tomoa...
Veo que el azul te ha tomado como en un reflejo colores siempre azul...siempre azul...

Até
Kakau