martes, abril 04, 2006

Adiós

Por qué me siento así. Por qué mis lágrimas son de sangre. Por qué me duele la cabeza y tengo náuseas. Por qué cierro los ojos y todo sigue dando vueltas a mí alrededor. Por qué no puedo respirar. Por qué estoy llorando. Por qué. Por qué la lluvia no quema.
Me estoy yendo. Mi cuerpo no responde. No puedo levantarme del suelo. Ya no. No quiero llorar más. No quiero. De qué vale una lágrima, aunque sea la última. Algo dentro de mí se rompió. Me voy. Me estoy yendo.
Por qué me haces llorar así.
Esta muerte lenta… agonía de tus besos… de tu piel que jamás llegó. Olvídate de mí. He muerto. Adiós.

1 comentario:

Anónimo dijo...

...jamás te vayas lejos del caracol...no te olvides que perderlo es no encontrarnos...escucha una vez más el murmullo...(K)